Durante el evento sobre “la revolución de la economía digital” organizado por LA NACION, el consultor Enrique Carrier analizó a fondo la actualidad del sector y los cambios que provocaron los OTT
En el marco del capítulo 6 del evento “La revolución de la economía digital” organizado por LA NACION, Enrique Carrier, experto en el área de las telecomunicaciones, brindó un panorama de todos los cambios que atravesó el mercado en los últimos 15 años y los desafíos que planteó la llegada del streaming y sus proveedores, los llamados Over The Top (OTT).
En diálogo con la periodista de LA NACION Julieta Rumi, Carrier (fundador de la consultora especializada Carrier y Asociados) sentenció que “la industria de las telecomunicaciones ya no existe más, tiene 15 años que van desde el momento en el que empieza la digitalización y desaparecen las redes de servicios: una red para TV, una para telefonía y así”.
El especialista explicó que el escenario cambió y hoy se habla de mercados maduros, con crecimiento casi vegetativo, donde los servicios tradicionales (que tenían las empresas de telecomunicaciones) fueron canibalizados por los Over The Top, que son de un proveedor distinto. “Por ejemplo, en los celulares cuando desaparecieron los SMS por WhatsApp. Ahí tenés la perdida de fuentes de ingreso y en el fondo llegaste a una comoditización de la conectividad, donde lo que importa es cuántos megas me das por mes”, ejemplificó Carrier.
En los últimos 12 años, la valuación bursátil de las empresas de telecomunicaciones cayó un 35%, dijo. “Eso te da la pauta que para los inversores no hay tanto interés”, apuntó. Otro indicador que mencionó es el Ingreso Promedio por Usuario: si se toma, en el caso de los celulares, el de 2010, actualizado por inflación, se pasó de US$18 por mes en 2010 a US$4 por mes en 2023, comparó.
¿Cómo respondió la industria ante estos escenarios?
La respuesta de la industria a ese cambio de escenario fue una consolidación, explicó Carrier. En los últimos cinco años, indicó, hubo más de 500 fusiones entre empresas de telecomunicaciones en todo el mundo, de las cuales 400 eran de conectividad fija y otras 100, operadores móviles.
“Hay menos jugadores más concentrados. Esto es importante tenerlo presente desde el punto de vista de los reguladores”, indicó Carrier y agregó que “una crítica grande es que ponen mucha traba a este tipo de consolidaciones y hacen que Europa se atrase tecnológicamente”.
Otra situación que empezó a darse según comentó es el uso de infraestructura compartida: en vez de que cada operador tenga su red y que por la puerta de una casa pasen dos o tres redes, aparecen distintos modelos para que dos o más empresas usen la misma infraestructura (los mismos cables). Eso reduce los costos y lleva a que la diferenciación ya no sea la red de fibra sino el tipo de servicio que cada empresa presta.
“Lo que fue apareciendo son empresas de infraestructura que te ponen los cables, postes (la infraestructura) y esa capacidad la venden a dos o más clientes que dan servicio. Por ese lado, la industria trata de adaptarse”, señaló.
¿Qué puede hacer el Estado para fomentar la industria?
Carrier explicó también que la industria en su conjunto está en un proceso que requiere inversión porque atraviesa tres migraciones: las redes fijas que pasan del cobre a la fibra (y necesitan re-cablear); la aparición del 5G en el caso de las redes móviles; y por último, la aparición de los satélites, que tendrán su incidencia en la brecha digital en términos geográficos.
El experto afirmó al respecto que el Gobierno como regulador tiene que ser consciente de que se trata de una industria diferente a la conocida. “En la Argentina se regulaban los precios de los servicios, se exigía una prestación básica financiada por operadores. En términos de compartición, todo lo que ayude a incentivar a que las empresas compartan, tenés beneficios impositivos”, ejemplificó.
Otro tema a tener en cuenta para el especialista es el rol importante que tienen las OTT en el mercado en el que detalla: “Algo importante es el factor de los OTT, donde hoy cada vez más estas empresas tienen una demanda sobre la infraestructura. Algo que se está dando acá es que va a haber mas fusiones y adquisiciones y no hay que ponerles trabas, para que traigan competencia. Una mayor flexibilidad en el uso del espectro”.
¿Los OTT deberían pagar?
Ligado con este último punto, Carrier dijo que el tema de que los OTT tengan que aportar por su uso de las redes (dado que demandan cada vez más infraestructura) no está resuelto en el mundo. En Corea del Sur, contó, hubo un caso del operador de ese país que llegó a un acuerdo con Netflix para que la empresa de streaming pagara por el uso de la infraestructura. “Hay que renovar muchas infraestructuras para buscar ingresos por otro lado”, señaló.
Sobre el final, Carrier se refirió a la valuación de los OTT: “Yo creo que hay cosas más estables, mensajería de voz hay un dominio claro de WhatsApp, pero si hablás de video no hay nada asentado. Ahora da la impresión de que vas a entrar en un proceso de consolidación. La generación de contenidos es muy cara y los precios subieron por encima de la inflación”.
“Todavía son mercados que no terminaron de asentarse, por eso se buscan nuevos modelos con publicidad o sin publicidad. Y eso sumado a los enormes costos de los contenidos que hacen que se levante el pie del acelerador y es probable que entremos en un periodo donde los cientos de OTT de video que haya se consoliden en unos pocos”, cerró.